Barcelona tiene muchas caras: la de Gaudí, la medieval, la modernista, marítima, la deportiva y olímpica… Y justo esta última era la que íbamos a ver en nuestro tercer día de viaje a la Ciudad Condal: primero visitaríamos el Camp Nou del F.C. Barcelona, y luego la Zona Olímpica, aunque el día lo empezaríamos en el Monasterio de Pedralbes.
DÍA 3
Nuestra primera intención era ir al Monte Titidabo, pero se quedó en intención. En mis anteriores visitas a Barcelona, siempre había ido al Monte Tibidabo porque me encantan las vistas de la ciudad que ahí desde allí arriba. También en la cima se puede entrar en el Parque de Atracciones del Tibidabo y en el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón.
Una de las maneras de llegar es con el mítico tranvía azul -tramvia Blau-, un tranvía de 1901 que para en la plaza de John Kennedy y que llega hasta donde se coge el funicular que sube hasta la cima del monte Tibidabo.
Pero después de estar esperando 20 minutos en la parada del tranvía, y con más y más guiris también esperando, allí no aparecía ningún tranvía ni azul, ni de ningún color. En esto que un conductor de un autobús que pasaba por el carril contrario se baja y se nos acerca para decirnos que en esa época el tranvía solo funciona los fines de semana. ¡Vaya! Así que cambio de planes.
Contenidos del post
Monasterio de Pedralbes
Cogemos el Bus Turístic para ir al Camp Nou que quería verlo Gus aunque es madridista. Pero antes, nos bajamos en la parada del Monasterio de Pedralbes.
[su_box title=”Monasterio de Pedralbes” box_color=”#22c5b8″]Fue fundado por el rey Jaime II y su esposa Elisenda de Moncada en 1326.
En él habitaban monjas de clarisas, que en su mayoría eran hijas de nobles. Junto al monasterio, la reina construyó un palacio al que se trasladó a vivir cuando murió su marido. En 1931 fue declarado Monumento Histórico Artístico.
Destaca de su visita: el retablo gótico de su iglesia, el claustro y el sepulcro de la reina Elisenda.[/su_box]
En el interior del monasterio no dejan entrar con mochilas y hay que dejarlas en la entrada. Así que las dejamos y entramos solo con la cámara. Dimos una vuelta por el claustro, que fue lo que más me gustó y entramos también en la iglesia. Una vez visto, volvimos a coger el Bus Turistic hasta el Camp Nou. De camino, el autobús pasa por los Pabellones Güell -donde hay otra parada del bus-, que son unas edificaciones de Gaudí por encargo de Eusebí Güell.
Camp Nou
Al llegar al Camp Nou había una cola enorme para las taquillas para comprar las entradas (23 euros los adultos y los menores hasta 5 años, gratis) al Camp Nou Experience que incluye la visita al Museo y un tour por el Camp Nou.
En primer lugar, dimos una vuelta por el museo. En él, se pueden ver las copas de las ligas ganadas, las Copas de Europa, y otros trofeos conseguido, así como conocer un poco más de la historia de este club de fútbol… Esta visita solo es apta para aquellos a los que les guste el Barça, porque a mí la verdad es que me pareció un poco rollo…
Tras la visita, entramos a ver el campo por dentro. Y esto si que es más interesante, y no hace falta ser de este equipo. Se visitan los vestuarios, pero solo los del equipo visitante. ¡Y qué bien los cuidan! ¡Si tienen incluso jacuzzi dentro del vestuario! Si son así los del equipo visitante, seguro que son mejores los del equipo local.También se pasa por la sala de prensa donde dan las ruedas de prensa tras los partidos… E incluso te puedes sentar en donde se sienta el entrenador y hacerte una foto. Otra zona curiosa es la del túnel de vestuarios… Cuando lo atraviesas te sientes un poco un jugador de fútbol. Por cierto, llama la atención que en el túnel tienen una pequeña ermita. Supongo que para encomendarse a la virgen o a dios antes de jugar.
Luego se ve el terreno de juego. ¡Qué grande se ve a pie de pista! Se ve también la zona vip y la zona donde se sitúan los periodistas que asisten a cubrir el partido. ¡Tienen unas vistas impresionantes del campo!
Tras la visita volvimos a coger el Bus Turistic hasta la avenida Diagonal, para hacer trasbordo y coger otra línea de este bus para ir hacia el Estadio Olímpico. Aunque antes comimos unos menús del día en Casa Danone.
Barcelona Olímpica
Lo primero que visitamos es el Estadio Olímpico. Se ubica en la montaña del Montjuïc. Su visita es gratuita. Lo que se puede ver del estadio son las gradas y el pebetero.
[su_box title=”El Estadio Olímpico” box_color=”#22c5b8″]Desde 2001 se llama Estadio Olímpico Lluís Company, en nombre del primer presidente de la Generalitat de Cataluña, que fue ejecutado por el régimen franquista. Anteriormente se le llamaba Estadio Olímpico de Montjuïc.
Fue construido con motivo de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929. Ese año, se jugaron varios partidos de fútbol de Primera División.
Con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992 fue remodelado. Acogió la ceremonia de inauguración y de clausura de los Juegos. [/su_box]
A pocos pasos del Estadio, se encuentra el Museo Olímpico y del Deporte Joan Samarach. Es un museo totalmente accesible para personas con movilidad reducida y para ir con carritos de bebé.
En el museo se hace un repaso a la historia del Olimpismo y del deporte en general. También se pueden ver cosas relacionadas con los Juegos Olímpicos de Barcelona: como, por ejemplo, algunos de los elementos que se utilizaron en la ceremonia de inauguración. Es interesante si te gustan el tema de las Olimpiadas.
Al salir del museo, volvimos a montar en el Bus Turistic dirección el Puerto Olímpico, que es el puerto deportivo que se ubica frente a lo que fue la Villa Olímpica durante los Juegos Olímpicos del 92, entre las playas de la Barceloneta y Nova Icària. Durante los Juegos, fue la sede de la competición de vela.
Dos de los símbolos del Puerto Olímpico son dos torres situadas junto al mar y que corresponde al Hotel Arts y a la Torre Mapfre y un pez gigante dorado que hay entre medias de ambas torres, obra del arquitecto canadiense Frank Gehry.
El Puerto Olímpico de Barcelona se ha convertido en los últimos años en un lugar de ocio importante tanto de día como de noche. No faltan terracitas y restaurantes donde tomar algo o comer, ni pubs donde tomar una copa por la noche. Nosotros aprovechamos que Iris quería merendar para hacer una parada y tomarnos algo en una terraza del puerto.
Tras el descanso, volvimos a montar en el Bus Turístic para enlazar con el metro y regresar al hotel. Esa noche teníamos cena con tres de nuestros compañeros Globellers: Adela y Raúl de Callejeando por el Planeta e Isabel de Diario de a bordo. El lugar elegido una pizzería pequeña y coqueta del Raval que nos recomendó Isabel.
[su_note note_color=”#CABDAA” text_color=”#010101″]Gastos del día
- Entradas al Monasterio de Pedralbes: 7 x 2 = 14€
- Entradas al Camp Nou: 23 x 2 = 46€
- Comida en Casa Danone en avenida Diagonal: 2 menús del día: 12,5 x 2 = 25€
- Entrada al Museo Olímpico: 5,10 x 2 = 10,20€
- Cerveza y smothies en el Puerto Olímpico: 8,05€
- Cena en pizzería del Raval: 29€
- Taxi para volver al hotel: 9,50€
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Puedes creer que no he ido nunca al monasterio??? A ver si nos animamos a ir!<br />Un saludo y merci por recordarme lugares de mi ciudad que aun tengo que visitar U.U
Verónica, muchas veces tienen que venir gente de fuera a donde vivimos para que nos descubran rincones que no habíamos visitado! A mí me pasa con cosas de Madrid igual!
Yo el Monasterio tampoco lo conozco, y he visitado varias veces Barcelona, lo que no visitaria es al Camp Nou porque no me gusta el futbol!
A mí tampoco me gusta mucho el fútbol que digamos, pero Gus quería ir, así que tuve que ceder porque otras veces vamos a sitios que él no quiere ir y que a mí me interesan, jejeje
A mí Cesc también me hace visitar los campos de fútbol de las ciudades a las que vamos!!! Y el monasterio de Pedralbes muchas veces pasa injustamente desapercibido.
A mí Gus también me hace visitar siempre que es posible los campos de fútbol!! ayyy estos hombres!! jejejeje El monasterio no lo había visitado en otras ocasiones y la verdad es que es un sitio precioso que debería haber visitado antes!
si es que Barcelona tiene tanto que ver!! la única visita que no haría sería la del camp nou, jeje. Un abrazo
Aquí al marido se le antojó ir a ver el Camp Nou y eso que es madridista!!! jajajaja Pero si hubiera sido por mí, no habría ido! jajaja
Toda esta visita nos faltó por ver cuando estuvimos la última vez por Barcelona, yo solo me acerqué a ver el Camp Nou por fuera una mañana que dejé a Carmen dormida, pero la próxima vez me animaré, aunque sea madridista como tu marido, no está mal estudiar la casa del rival xDDDD<br /><br />¡Un abrazo! 😀
José Carlos, para los futboleros, aunque no sean del Barça, creo que es una cita imprescindible!!<br />Un abrazo
Qué ganas de volver por Barcelona y dedicarle el tiempo que se merece! Yo estuve una vez en el Camp Nou, pero allá por el 97 (qué mayor me siento, jaja)
Verónica, Barcelona es una ciudad a la que siempre apetece volver!! Yo ya he ido 4 veces. Es la ciudad a la que más veces he ido de turismo! jejeje
Que mala sombra con lo del tranvía al Tibidabo… precisamente es de lo poco de Barcelona que yo veo desde mi nuevo trabajo. <br />Ahora cuando acaben las fallas, volveré a tu serie de entradas de Barcelona, para saber qué no tengo que perderme… aunque yo al Camp Nou, creo que tampoco iré, jejeje 😉
Soy muy fan de visitar estadios de fútbol, y el del Barcelona lo visité de niño un par de veces, aunque solo tenían una copa de Europa, no como ahora que ya tienen 4… Tengo que volver a disfrutar de ese campazo!! Eso si, no me quiero imaginar lo que vale el tour, porque recuerdo que era caro….<br />Saludos
Qué curioso el estadio olímpico! No lo conocía y la verdad, si me dijeran que qué es no hubiera acertado, no me parece un estadio! <br />Y menos mal que os dijo el conductor lo del tranvía, me apunto que no funciona en fin de semana por si voy. Un abrazo!
Barcelona siempre merece una visita!, y me sumo a los que escapamos de los campos de fútbol, jejejeje. El Monasterio es Precioso, también el hospital de San Pau, que a menudo no se visitan por los viajeros, y merecen la pena.<br />Un abrazo!
Que bella ciudad Barcelona !