Cuando decidimos viajar al Sudeste Asiático con nuestra hija el pasado verano, una de nuestras mayores preocupaciones eran las enfermedades tropicales que suele haber en aquella zona. En el Centro de Vacunación Internacional de Madrid, nos habían advertido de que tanto en Malasia como en Singapur había riesgo de dengue y en el caso de Borneo, había también riesgo de malaria, aunque era muy bajo. ¿Cómo podríamos prevenir estas enfermedades?
Contenidos del post
Cómo se transmite el dengue y la malaria
En regiones de clima tropical, como puede ser el Sudeste Asiático, el dengue y la malaria o paludismo son dos enfermedades que se dan con cierta frecuencia, al igual que el zika y el virus del chikungunya.
Todas estas enfermedades tropicales se transmiten por la picadura de mosquitos. En el caso del dengue, el mosquito transmisor es el Aedes aegypti, que suele ser diurno y urbano, mientras que en el caso de la malaria, el transmisor es la hembra del mosquito Anopheles y suele ser nocturno y rural, siendo la mayor incidencia al atardecer y al amanecer.
- Los síntomas del dengue:
Los síntomas más frecuentes son parecidos a la gripe: fiebre alta, dolor de cabeza, dolor muscular y en las articulaciones, que duran alrededor de una semana. En una minoría de casos aparecen síntomas potencialmente graves como dolor abdominal, vómitos persistentes,o algún tipo de sangrado. No existe un tratamiento para evitar el dengue. Si se tiene fiebre cuando se ha estado en una zona tropical, se recomienda acudir a un centro sanitario y evitar tomar aspirina.
- Los síntomas de la malaria o paludismo
Pueden aparecer a partir del séptimo día de estar en zona tropical. Los síntomas más frecuentes son fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y dolor en las articulaciones, pero también se pueden asociar síntomas gastrointestinales. Sin tratamiento, puede agravarse y terminar afectando a órganos vitales, pudiendo ser mortal. Por lo que ante cualquier síntoma, se recomienda acudir a un centro sanitario. Para la malaria si hay tratamiento preventivo, pero no siempre está aconsejado tomarlo.
Consejos para evitar la picadura de insectos en el Sudeste Asiático
Antes de nada, hemos de decir que no somos médicos ni personal sanitario. Este post está escrito en base a nuestra experiencia y a la información que recibimos en el Centro de Vacunación Internacional de Madrid que visitamos.
Recomendamos que si vas a viajar al Sudeste Asiático o cualquier lugar tropical, visita un centro de salud internacional donde te informarán gratuitamente, y donde te darán algún folleto informativo como este. Eso sí, sé previsor y coge cita previa con antelación porque cuando se acerca el verano, suele ser complicado conseguir una y sin ella, no atienden.
- Uso de repelente que contenga DEET al 40-50%, o IR 35/35 o icaridina, como puede ser Relec extrafuerte, Halley o Autan activa, cada 6-8 horas. Nosotros usamos el primero y hemos de decir que no sufrimos ni una picadura. Para menores de 2 años está contraindicado este tipo de repelentes. Y para niños entre 2 y 11 años, el máximo de aplicaciones que recomiendan son 2 al día.
- Uso de ropa de colores claros que cubra lo más ampliamente posible. Es decir, usar en la medida de lo posible manga larga y pantalones largos, junto con calzado cerrado. Nosotros usamos este tipo de ropa cuando visitamos zonas rurales y selváticas, como por ejemplo, cuando estuvimos en el Parque Nacional de Bako.
- Impregnar la ropa con permetrina, que es un compuesto químico que funciona bien como repelente para la ropa. Nunca se puede usar directamente en la piel.
- Alojamientos: Alojarse en sitios que dispongan de aire acondicionado. Dormir con las ventanas cerradas y con el aire puesto. También dormir protegidos con mosquitera, a ser posible, que esté impregnada de permetrina. Usar insecticidas en la habitación -recomiendan pulverizar la habitación o usar difusores eléctricos de insecticidas-.
- No usar perfumes, ni cremas que contengan algún aroma ni desodorante con algún tipo de olor. Así, compramos crema solar sin perfume. No usamos ninguna colonia durante el viaje. Y el desodorante que usamos tampoco tenía perfume. Tanto la crema solar como el desodorante sin perfume los compramos en Mercadona.
- Profilaxis de la malaria: en nuestro caso, al pasar solo 3 días en Borneo, que era la zona donde había riesgo, y en concreto, al elegir Kuching, que es la zona con menor riesgo posible, nos recomendaron no tomar nada, porque suele tener bastantes efectos secundarios. Tan solo nos recomendaron el uso del repelente y de ropa de manga larga a la hora de visitar lugares selváticos, donde puede haber mayor presencia de mosquitos.
Impregnar la ropa con permetrina
Dónde conseguir la permetrina
La permetrina se utiliza principalmente como insecticida. No afecta al ser humano, pero no así a los gatos, para los que puede resultar muy tóxico. Aunque eso sí, evita el contacto con la piel. Es un líquido denso, como un aceite, y es fotosensible, por lo que hay que tener cuidado con que le dé la luz solar, porque entonces pierde sus propiedades insecticidas.
Podemos encontrar la permetrina en dos formatos: pura, aunque no se puede usar directamente, sino que hay que diluirlo en alcohol, y ya diluida. En Vacunación Internacional nos comentaron que en las farmacias que hacen fórmulas magistrales se podía encontrar diluida.
Conseguir permetrina diluida puede ser una ardua tarea. De hecho, nosotros no la conseguimos encontrar. Preguntamos en varias farmacias, y en todas, nos pidieron una “receta”, un papel en el que se indica la composición para hacer la fórmula magistral, y que nos deberían haber dado en Vacunación Internacional. Pero a nosotros no nos dieron ninguna receta. Así que si vas, asegúrate de que te la den porque sino en la farmacia no te venderán la solución.
Dado que nuestro viaje se organizó solo dos meses antes, fue imposible encontrar una segunda cita en Vacunación Internacional para ir a pedir dicha receta, y tuvimos que buscar otra solución.
Otra opción que barajamos fue comprar en Amazon este producto que tiene permetrina y viene listo para usar. Pero leímos las opiniones y vimos que además de ser muy caro, íbamos a necesitar varios botes para poder impregnar la ropa de dos adultos y una niña para un mes de viaje.
Así que al final nos decantamos por comprar la permetrina pura y hacer nosotros mismos la mezcla. Pero es complicado encontrarla porque no está a la venta en cualquier comercio de productos químicos, como se podría pensar.
Haciendo una búsqueda por internet, vimos que había una empresa en Barcelona que vende por internet, Quimics Dalmau, donde se puede comprar. Además, la envía por mensajería a toda España en solo dos o tres días.
El precio del bote fue de 20,69 € (comprado en junio de 2018, en la actualidad el precio ha subido a 23 €), a lo que hay que sumar los gastos de envío (11,90 €), con lo que al final el bote en cuestión nos salió por 32,59 €. Si vives en Barcelona o cerca, puedes comprarlo directamente allí y te ahorras los gastos de envío.
Cómo hacer la mezcla
Cuando la compramos, solicitamos información sobre cómo hacer la mezcla y nos remitieron a esta página. Además, en el paquete, nos enviaron también instrucciones para su uso.
La mezcla que se necesita para impregnar la ropa tiene que ser con permetrina diluida en alcohol de 96º. Nuestro frasco de permetrina era de 50 gramos. Y siguiendo las instrucciones del fabricante, rellenamos dicho frasco con alcohol -porque no viene lleno- y lo agitamos bien.
Si la permetrina hubiera estado solidificada, recomiendan calentarla con agua caliente para que se pueda mezclar con el alcohol sin problemas.
Cuando realices la mezcla, así como cuando impregnes la ropa, usa guantes para evitar el contacto directo de la permetrina con la piel.
Cómo usar la mezcla de permetrina y alcohol
Siguiendo las instrucciones del vendedor, impregnamos la ropa de esta manera:
- De la mezcla realizada, extraer con una jeringuilla 0,5 ml y mezclarlo en 1 litro de agua. Nosotros para este paso usamos un barreño, en el que poníamos un litro de agua y 0,5 ml de la mezcla de permetrina.
- Sumergir o pulverizar por completo la prenda. Nosotros la sumergíamos hasta quedar completamente empapada, y la dejábamos sumergida durante unos 2-3 minutos.
- Escurrir la prenda y tenderla a la sombra para que se seque. Es importante que no le dé el sol porque entonces no habrá servido para nada el proceso realizado. El agua escurrida, se puede reutilizar para la siguiente prenda a impregnar.
Por cierto, necesitamos botecito y medio de permetrina para la ropa de los tres. Hemos de decir que aunque viajamos un mes, llevábamos ropa para unas dos semanas, porque hicimos la colada a mitad del viaje. El primer bote no nos cundió apenas, pero creo que porque no lo hicimos bien. Y el segundo, nos sobró la mitad. Creo que de haber hecho bien la mezcla desde el principio, con un bote habría sido suficiente.
Se supone que hay que impregnar toda la ropa exterior, incluido calcetines y gorras de sol. Pero nosotros solo impregnamos camisetas y pantalones, así como vestidos, y las gorras.
El efecto de la permetrina en la ropa se pierde muy poco a poco. Dicen que puede aguantar sin mayor problema entre 3 y 6 meses si no se lava. Aunque la ropa se lave, la permetrina aguanta tres o cuatro lavados.
Una vez hecha la mezcla, se supone que se puede almacenar unos tres meses. Después, habría perdido sus propiedades.
Nuestro equipamiento para prevenir las picaduras
¿Y qué es lo que usamos en nuestro viaje por Malasia y Singapur para evitar picaduras?
- Cremas solares sin perfume del Mercadona
- Desodorante sin perfume del Mercadona
- Relec extrafuerte: llevamos 9 botecitos, y regresamos con 3. Solo usamos el repelente durante nuestra estancia en Malasia y Singapur, que fue de 24 días.
- Mosquitera impregnada con permetrina
- Toda nuestra ropa exterior impregnada con permetrina
- Pulseras antimosquitos del Decathlon con durabilidad por un mes (no sé si serán de verdad efectivas si se usan solas, pero combinadas con todo lo demás, a nosotros nos dieron buen resultado).
- Difusor eléctrico de insecticida para poner en las habitaciones por las noches.
- Insecticida de spray para echar en las habitaciones (aunque en un aeropuerto de Malasia, en Kota Bharu, a mitad de viaje, nos lo requisaron y eso que iba en el equipaje facturado).
Podemos decir que no sufrimos ninguna picadura en el viaje. Bien es cierto que tampoco vimos demasiados mosquitos, pero nuestro equipamiento fue muy eficaz, y eso que tanto yo, como la niña, somos bastante propensas a las picaduras.
De hecho, cuando estuvimos en Cancún, a mí los mosquitos me acribillaron. También es verdad que entonces no usamos nada de lo que llevamos a nuestro viaje a Malasia y Singapur. Sí que llevamos repelente para darnos en el cuerpo, pero era de la marca blanca de Mercadona y no sirvió absolutamente para nada, y me picaron igualmente.
En cambio, el Relec y todo lo demás empleado nos ha funcionado de maravilla.
Seguro de viaje
Además de nuestro arsenal contra mosquitos, también viajamos con seguro de viajes. Ya os contamos que para nosotros es importante viajar seguros siempre pero sobre todo en viajes largos y a destinos exóticos como el del pasado verano.
Buenos consejos Mari Carmen. Yo enfermé de malaria en Malí aún protegiéndome bastante, pero claro, estuve muchos meses viviendo allí y fue casi inevitable. Lo pasé fatal. Así que cualquier medida de prevención es buena.
Un saludo!
Al pasar muchos meses en un lugar con riesgo…. Es difícil librarse! ¿Y qué tal fue el proceso de recuperación?
Que articulo más interesante! Y que viaje tan chulo hicisteis con Iris. Nosotros cuando me quedé embarazada, tuvimos que cancelar el viaje que teníamos planeado para ese año a Indonesia, KL, Camboya y Singapur y ahora no veo el momento de volver con Carla. Pero creo que lo retrasaremos unos años más por el tema de vacunas, ¿con cuantos años viajó Iris a Malasia?
Fuimos cuando tenía 5 años y medio. No quisimos ir antes por el tema de las vacunas, pero se le pueden poner sin problemas antes de esa edad. Lo que pasa es que mi hija es muy aprensiva a las vacunas y no queríamos hacerle pasar el mal rato.